Hoy hemos tenido una primera sesión en torno a la interioridad, en la cual hemos hablado sobre la luz.
Hemos buscado en nuestro interior nuestra luz, que brilla inmensamente, y hemos observado a nuestro alrededor como la luz del sol baña cada rincón de nuestra querida Tierra.
¡Qué hermosa es la creación!
En grupo, unidos como una auténtica comunidad fraterna de amigos que se ayudan los unos a los otros, hemos hecho una actividad en la cual hemos formado entre todos, a un solo latido, un gran sol:
¡El sol de nuestra clase!
Después, con trocitos de papel charol que cada uno de los compañeros y compañeras han rasgado con sus deditos, como auténticos artistas, hemos realizado un collage.
Pero la diversión no ha acabado ahí porque juntos nos lo hemos pasado en grande pintando nuestro gran mural con temperas.
Mmm, ¿qué podríamos ponerle más? Parece que le falta algo:
Nuestro gran mural no estaba todavía acabado, necesitaba un toque especial de algo más. ¿Qué podrá ser?
Entonces, se nos ha ocurrido entre todos ponerle unas gotas de color pegándole mariposas y flores, o como se le ha ocurrido a Santiago: ¡parecen cascarones de huevo!
Nuestro precioso mural hará que, haga el tiempo que sea fuera, en nuestra clase siempre brillará el sol.
Y después, a petición popular entre toda la clase, hemos cantado y bailado juntos la canción El Señor Sol.
¿La cantáis y bailáis con nosotros desde casa?
